miércoles, 25 de junio de 2008

22

Empatizo contigo, Garcilaso.
Tantas veces envié a paseo
a mi fría Galatea
y luego viene ella
con su cuello blanco,
su melena de oro,
sus tacones fatales,
enfundada en unos levi's bootcut...
y cómo le digo todo
lo que le he dicho por escrito.
Ninguna palabra me salva entonces
de las manos de mi amada.
Es una araña. Y yo una mosca.
Si me dice Ven me engulle,
a mí, a mis versos,
y a mi corazón de papel mojado.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

pegale un buen escupitajo en la cara

elpalabarista dijo...

ja ja

MUNDOGUSANO dijo...

no está mal. es interesante lo que escribes.
saludos desde el mundo de los gusanos

elpalabarista dijo...

Mundo gusano, fui a echar un vistazo por tu blog y no estoy invitado a ello.
Pues un saludo desde aquí.

Jara dijo...

Seca el corazón, quizás así te puedas salvar de sus garras